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Antoni de Moragas i Gallissà (Barcelona) nació, estudió y trabajó como arquitecto en Barcelona.

Moragas aceptó las bases del Racionalismo, a las que aportó un organicismo arquitectónico para así dar calidez a la relación entre la forma y el uso. Sus piezas de mobiliario son a día de hoy clásicos del diseño, unas piezas que ya fueron pensadas con el enfoque adecuado para su producción industrializada, aunque en su momento sólo se fabricaron en series limitadas para un proyecto o cliente concreto, que acudían a él ante la dificultad de encontrar modelos comerciales acordes con sus nuevas ideas.

“La artesanía ha muerto para dar paso al Diseño (…) El artesano modelaba guiado por su instinto, mientras que el diseñador industrial planifica guiado por su razón”, escribió en 1961 en sus Cuadernos.